Ayer por la noche regresamos a la casa tarde y en eso que tonteas antes de irte a dormir tocan el timbre.

Era la vecina, que sacó a pasear a su perro, para contarnos que había visto a la mascota de la casa afuera desde hace rato. Mi flaca de la puerta me gritó para que salga que la ayude a buscar ya que el susodicho animal peludo no estaba en la puerta o cerca. La vecina dijo que su perro lo asustó y se fue persiguiendolo hasta la esquina.

Hay 2 posiciones mentales aqui:

- La maldita de la vecina que no agarra a su perro.
- La buenisima gente de la vecina que nos toca el timbre para avisarnos.

Salí en piyama a la puerta y mi flaca casi en pánico me decía que saque el carro para ir a buscar al bicho este. Bicha mejor dicho.

Cómo voy a sacar el carro para buscar en 1 cuadra? Ella ya estaba alejandose de la puerta gritando el nombre de la bicha y silvando. Una neurona le pasó la voz a la otra en mi cabeza y vi mi bicicleta. Salí en en piyama y en bici, increíble. (en un par de días me da gripe de nuevo).

Los que me conocen saben que tengo cierta simpatía con los animales y sobretodo con la "amistad" que se crea con tu mascota de toda vida. La bola de pelos esta no es mía pero si de mi flaca pero no tiene que ver mucho.

Salimos a buscar: mi flaca, la vecina y yo.

Algo de 1 cuadra después la encontré intacta, asustada y arrinconada en la puerta de una casa cualquiera y grité: "Acá está!"... era algo como 12 de la noche y la hora no importa para gritar esa buena noticia.

La manera en que mi flaca la cargó y le hablaba nunca lo había visto. Cuál película.

Casi como escena de la película Hachi.

*película para llorar

Luego que regresamos a la casa los 3 (no, no con la vecina) sólo nos quedo reír. Y el famoso que hubiera pasado si...

Yo sólo pensaba que hay que enseñarle a regresar a la casa.

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